Alguien puede decirme ¿Cuándo se acaba el dolor?
Cuando el pecho se desgarra
y la fría estaca del sufrimiento se clava en lo más profundo de nuestro ser, ¿quién puede responder?
¿Cuándo la voz de la angustia callará y se volverá un susurro que no taladre los días y las noches?
Quién puede decirme ¿cuándo la luz se abrirá paso en la negrura para iluminar el sendero
por donde mis pasos vacilantes caminan día a día?
Busco mi rostro en los espejos del recuerdo, y tan sólo una mueca se refleja.
Le doy cuerda al reloj de mi existencia, mas no hay un cucú melodioso
sólo se escucha el monótono tic tac de una vida vacía.
Para ustedes mis queridos, mis amados hijos
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